Se lleva a cabo una nueva edición de la tradicional manifestación de fe.

Tras una fría madrugada en la ruta, los miles de peregrinos que salieron desde Hasenkamp, siguen camino a Paraná. Las bajas temperaturas de la noche fueron el condicionante de esta edición que comenzó en la soleada tarde del viernes y se prevé que finalice en el atardecer de este sábado en el santuario de la Virgen de Schöenstatt en la zona sur de Paraná.

Movilizados por la fe, pidiendo o agradeciendo, los caminantes recorren 90 kilómetros entre las dos ciudades, en un rito multitudinario que comenzó hace 41 años por iniciativa de un par de fieles católicos.

El lema de este año es “Madre, enséñanos a construir y sanar la Patria” y tendrá su punto máximo cerca de las 19 cuando se realice la misa en el Santuario de La Loma presidida por el Arzobispo de Paraná, Monseñor Juan Alberto Puiggari.

Sin mayores complicaciones, con una aceitada organización y superando los inconvenientes, la marea humana camina una vez más por rutas y calles, buscando el destino final.

En grupos parroquiales, en familia, en pareja o algunos en soledad, peregrinan desafiando sus propios límites físicos y mentales, con el solo objetivo de llegar.

Cada uno de los participantes tiene una razón y un motivo diferente, pero todos son convocados por el mismo interés en caminar, pedir o agradecer, como un tributo a la Virgen en vísperas del Día de la Madre.

Fuente : EntreMedioweb