Ariel Omar Pérez (38) alias el “Guascazo” sigue prófugo. Una persona vio el momento exacto del ataque. Varias brigadas policiales trabajan en la zona para dar con él. Se allanó su casa, ¿qué le encontraron?

Por Pablo Mendoza

Han pasado 24 horas del brutal femicidio en Angaco donde la víctima fue Yanina Pérez de la Vega y el principal sospechoso de este brutal crimen, Ariel Omar Pérez (38) más conocido como el “Guascazo” sigue sin aparecer. Con el correr de las horas se dieron a conocer datos impactantes en torno a este hecho y uno de ellos es que ambos compartían mucho tiempo en el cementerio de Angaco, ya que ambos trabajaban en el lugar .

Fuentes del caso dijeron a Tiempo de San Juan que Ariel Omar Pérez trabajaba en el municipio como contratado y que en el último tiempo tenía designada la tarea de pintor en el cementerio. Trabajos que los hacía en horario de tarde. Esto quiere decir que el principal sospechoso del homicidio trabajaba en las mismas instalaciones que la víctima fatal.

Según los investigadores, Yanina era la encargada del lugar pero hacía todo tipo de tareas. Es más, cuando ocurrió el ataque, ella estaba con una sopladora y aparentemente estaba por limpiar esa zona.

Testigos dijeron a la Justicia que el ataque ocurrió cuando ella le abrió el portón para que un camión entre al cementerio. A los segundos, el camionero descendió y escuchó los gritos de Yanina, cuando fue al lugar Ariel Pérez ya había apuñalado a Yanina.

Femicidio en Angaco: la discusión de Yanina con el “Guascazo”

Investigadores dijeron a este diario que varios testigos vieron discutir a Yanina Pérez de la Vega y Ariel Omar Pérez.

Según detallaron, esta presunta discusión habría sido hace cinco días. Supuestamente los testigos los vieron conversando en el municipio de Angaco.

Yanina Pérez de la Vega y Ariel Omar Pérez alias el «Guascazo»

El impactante relato de los cuatro testigos del femicidio en Angaco

La fiscalía de UFI Delitos Especiales, caso comandado por el fiscal Adrián Riveros, tiene el testimonio de cuatro personas que fueron las que ayudaron a Yanina. Uno de ellos es muy importante porque vio el momento exacto cuando el “Guascazo” la apuñalaba.

Según fuentes judiciales, este testigo presencial primero escuchó gritos y creyó que el hombre le estaba pegando a ella. Cuando se empezó a acercar a ellos vio que el atacante tenía un cuchillo. Contando que él se quedó paralizado.

Otros dos testigos declararon que vieron correr al “Guascazo” y meterse entre los parrales.

Y el cuarto testigo es el dueño de una camioneta Ford Ranger. Este último fue el que auxilió a la chica llevándola al Hospital Dr. Alfredo Rizo Esparza (Angaco).

Camioneta en la que el vecino trasladó a Yanina al hospital.

El operativo de búsqueda de la Policía

En la zona está trabajando personal de la Brigada Homicidios perteneciente a la UFI Delitos Especiales, policías del GAM, Montada, Canes, brigadas y comisaría 20ma.

Los trabajos se están realizando en diferentes zonas para dar con el paradero de Omar Pérez que lleva 24 horas prófugo y el cual está siendo buscado a nivel nacional.

Allanaron la casa del principal sospechoso

Personal de la UFI N°3 de Delitos Especiales este jueves allanó la vivienda del “Guascazo”. No encontraron pistas relevantes al hecho, pero si secuestraron documentación.

Ariel Omar Pérez vivía solo y cada tanto iba alguna mujer con la que mantenía una relación. Su casa queda ubicada a unos 8km del cementerio.

Cuando él cometió el ataque en 2020 estuvo prófugo dos meses y en ese entonces la División Homicidios lo detuvo en San Martín. Estaba trabajando para un hermano. Hicieron el allanamiento cuando todos los trabajadores estaban almorzando.

Momento de la detención de Pérez en 2020.

Este femicidio ocurrió alrededor de las 10:00 horas de este jueves. Yanina murió producto de las puñaladas que el «Guascazo» le propinó en uno de los accesos al cementerio de Angaco. Él escapó a campo traviesa. Ella fue enviada al hospital en una camioneta, pero perdió la vida camino al lugar. Han pasado 24 horas y el principal sospechoso sigue prófugo.

fuente : Tiempo San Juan